Sporting 0 - Racing de Ferrol 0; sin punteria.

Partido espeso ayer en El Molinón, se intentó todo para conseguir la victoria pero no hubo manera de perforar la porteria defendida por Queco Piña, por muchos motivos, Barral estaba negado de cara a gol, el línea estaba siempre con el banderín levantado, al equipo le faltó punteria, al Sporting le faltaba velocidad en la salida de balón y el entramado defensivo que dispuso Veiga para el Racing era muy difícil de superar. Si a ello sumamos que el Racing no tuvo ninguna ocasión clara para marcar todo ello nos da un empate sin goles.

Lo dicho, que el partido fue un monólogo rojiblanco, salvo los 10 primeros minutos de cada parte. Al principio del partido nuestro equipo era incapaz de enlazar 2 pases seguidos ante la fuerte presión de los gallegos que, a su vez, no sabían que hacer con la pelota cuando la tenían. A partir de ahí el Sporting fue controlando poco a poco el balón, moviéndolo con calma y las ocasiones iban llegando, porque una vez rebasado el poderoso centro del campo rival, la defensa gallega era un coladero que concedía muchas facilidades. Por desgracia Barral, que estuvo mejor situado que nunca como referencia arriba, estaba negado de cara a gol y falló 2 mano a mano con el portero además de tirarse a la piscina otras 2 veces en muy buena situación para el remate, el árbitro le cazó. Como los centrocampistas llegaban demasiado trastabillados de la pelea en la medular para terminar las jugadas se llegó al descanso con 0-0.

En la segunda mitad reapareció la torrija "post-descanso" y el Ferrol con la presión en el medio campo consiguió encerrar al Sporting en su área, afortunadamente la defensa, que estuvo magnífica todo el partido liderada por un inspiradísimo Iván, aguantó el chaparrón sin conceder ocasiones apoyada por Míchel que, aunque no estuvo tan fino en ataque como en los últimos partidos se multiplicó end efensa para suplir a Matabuena. La resistencia sportinguista se mantuvo hasta que llegaron los cambios, tardíos como casi siempre, un gris de Lucas dejó paso a Andreu que aunque no estuvo brillante permitió a Míchel incorporarse más al ataque cubriendo su espalda y dió más salida al balón que De Lucas (por cierto volvió a decepcionar el canterano) y Luis Morán reactivó el ataque al entrar por Pedro. A partir de ahí el Sporting volvió a mandar en el partido hasta el final y hubo de nuevo varias ocasiones claras para desnivelar el marcador, principalmente un tiro al poste de Kike Mateo y una colada de Luis Morán nada más entrar que Andreu estrelló en el cuerpo de Piña cuando este ya se habia tirado.

Al final empate a cero y la sensación que se escaparon 2 puntos de El Molinón, ante un rival correoso que seguirá sacando muchos puntos fuera de casa, ya que si era difícil "abrir el campo" en El Molinón en otros estadios más pequeños será casi imposible desordenarles. Me gustó mucho la paciencia del Sporting en ataque, la sobriedad en defensa y que el equipo no perdió nunca la fé en la victoria. El árbitro en la línea mala de la Segunda División, lo peor que se puede decir de ellos es que ayudan a no jugar y permiten pérdidas de tiempo contínuas, muy injusto con las tarjetas. Pese a todo viendo los resultados de la jornada el empate no es malo, ahora toca el asalto a San Sebastián, ¡¡¡¡ y con Matabuena !!!