Desequilibrados

El partido de Mallorca es ya historia. El Sporting salió goleado de la isla en un encuentro que destapó muchas carencias de la plantilla y boquetes en la planificación deportiva que los buenos resultados vienen tapando los últimos meses. Un equipo que sin 2 jugadores titulares no sabe a lo que juega, sin referencia clara arriba, con un doble pivote despoblado tras la marcha de Míchel y con los jugadores justos para una temporada en la élite del fútbol mundial. Una estatua muy grande merece Preciado por tener en zona tranquila una de las plantillas más desequilibradas de Primera. Momento idóneo éste para replantearse el futuro de los jugadores del primer equipo de cara al verano.

En Mallorca vimos un equipo huérfano de presencia en el centro del campo, con Rivera muy sólo y siempre superado por los medios rivales. La venta de Míchel dejó al de Puertollano sólo ante el peligro con 2 compañeros en claro declive físico y rendimiento en línea descendente desde el año pasado, y las incógnita de Lola -jugador de mi agrado pero del que, como todos los fichajes invierno, se desconoce su estado físico y su buen acoplamiento al equipo- y Portilla -que debe asimilar el cambio de Segunda B a Primera. El doble pivote se queda como podeis ver, como un experimento con gaseosa. Los buenos resultados de los últimos partidos no deben empañar la mala trayectoria del Sporting en los últimos tiempos, con un juego muy pobre y siendo dominado en casi todos los partidos por su rival en gran parte debido a la inferioridad en la zona ancha. Donde un jugador fuera de ritmo tras un año sin jugar como Lola rinde más que Matabuena y Diego Camacho a base de, basicamente, testiculina.

Por delante de Riverita tenemos la línea de media-puntas. Ahí tenemos a Diego Castro, Carmelo y de las Cuevas como teóricos titulares. El canario es la imaginación y el talento, pero podemos perderle fácilmente (y de hecho lo hacemos) por su propensión a las lesiones; con Diego tenemos gol, clase y regate, desequilibrio en estado puro y el alicantino aporta genialidad, toques de clase que cuando salen marcan la diferencia pero muy a cuentagotas, destaca sobre todo al contraataque. Como relevos tenemos al efervescente Luis Morán, velocidad, disparo y poco más; al nulo Maldonado, dinero a la basura y uno de los grandes errores de De Dios y Preciado; el perdido Pedro al que le viene enorme la categoria y el carismático Kike Mateo que te puede dar un partido de cada 20 y al que por desgracia le viene grande la Primera. Es decir, jugadores justos para 3 puestos de los que sólo Carmelo puede ayudar Carmelo en la creación ante un equipo bien armado.

En la delantera Bilic y Barral volvieron a la normalidad tras su magnífico (y por encima de su nivel) del año pasado, necesitan muchas ocasiones para materializar una. Afortunadamente las genialidades de los mediapuntas dan para desequilibrar partidos en un equipo montado para cimentarse en su defensa. Cogida con alfileres, no lo olvidemos. Los suplentes son lo titulares del año pasado y el exito de la línea radica en el acierto en el fichaje (¿suerte o De Dios es un genio?) de 2 centrales desconocidos, un jugador de segundo nivel en la liga portuguesa y un canterano del Barça que da el salto directamente de Segunda B a Primera para srr cacique de nuestra defensa. A ellos se une un centrocampista reconvertido al lateral con la liga empezanda por el lamentable rendimiento del carrilero zurdo titular. Los suplentes de esta milagrosa defensa son los titulares que fueron de largo los más goleados en liga el año pasado. Otr línea justa de efectivos.

Con estos mimbres Preciado tiene desahogado de momento al Sporting en la tabla (y esperemos que consiga el objetivo). Mérito de míster y jugadores y azar con las lesiones porque hemos comprobado que el equipo se rompe ante casi cualquier baja. Rivera, Diego Castro, Carmelo, Botía y Gregory sólo pueden ser suplidos por parches, se nota mucho cuando falta uno pero la ausencia de 2 o más de ellos deja al equipo en pelotas. La lesión de un sólo delantero dejaría a Preciado sin variantes en el ataque y la apuesta por la cantera es escasa (¿el lunar de Preciado esta temporada?), hay que probar a los Guillermo y compañía en vez de insistir con jugadores como Maldonado que tras mil oportunidades no demuestran nada. Si no lo hacemos ahora, con 11 puntos de ventaja con el descenso y medio equipo de baja y sin dinero para fichajes, ¿cuándo lo haremos?.

Sea como fuere es momento de moverse, hacerse con jugadores libres antes de que otros equipos salven la categoría. Arriesgar en el mercado de fichajes y limpiar de la plantilla esos hombres a los que la Primera les viene grandes y por un motivo u otro ya no dan el nivle para jugar con el Sporting. La suerte con las lesiones algún día se acabará y buscar la salvación con 12 jugadores es como jugar a la ruleta rusa. Aprovechemos el viento a favor, cuando empiecen a venir mal dadas puede ser demasiado tarde.