Es algo difícil de cuantificar y de medir, por lo que con frecuencia tiende a no valorarse en exceso, pero el nivel de unidad de un equipo es un factor importante. Los equipos que tienen éxitos juntos suelen dar sensación de unidad general, aunque cuando de verdad se nota es cuando las cosas no van bien del todo.
En el Sporting la unidad hasta ahora entre todos los estamentos ha sido uno de los principales eslabones de una cadena que nos ha permitido ascender y mantenernos hasta ahora en primera división, y el principal activo que este equipo ha recuperado, pese a tanto superávit, es la comunión con una afición que sin darle nunca la espalda al equipo sí que habia perdido un poco la fe y la ilusión en él.
Sin embargo, y pese a mantener el tipo y la unidad en las rachas negativas que en al menos cuatro ocasiones el equipo ha encadenado en esta nueva andadura en el lugar que le corresponde dentro del fútbol español, la primera división, yo nunca habia visto una unión tan sincera, un remar todos a una, un compromiso igual, en la historia de este equipo, como el que estoy viendo en esta racha mala.
Probáblemente porque por primera vez la figura de Preciado ha sonado como verdaderamente en la cuerda floja y eso ha reactivado a un bloque que va, con el mister, a muerte. De hecho, no nos engañemos, con frecuencia han logrado dar un nivel superior al que realmente la plantilla tiene y eso, más allá de tácticas y esquemas, se ha logrado con la filosofía de unión y grupo que Preciado ha sabido inculcar y manejar entre los nuestros.
Sea como sea, con todo lo que queda y a pesar de que hay que sumar lo antes posible y seguir sumando con frecuencia, esta semana ha aumentado aún más si cabe mi optimismo en este proyecto y mi certeza de que aunque evidentemente los resultados nos están haciendo hincar la rodilla, al final terminaremos en pie y es que, por muchas veces que te tiren lo importante es levantarte siempre una más. ¡Y sino que se lo digan a Rocky Balboa, jeje!
2 comentarios:
PUXA SPORTING y apor los 3 puntos en La Coruña. Saludos.
¡Gracias, Bruno! Al final hicimos todo lo posible y, al menos, rescatamos otro punto. Todos estos puntitos rescatados serán de oro cuando comencemos a sumar de tres en tres.
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