Sporting 1 - Alavés 1, perdonar se paga

Una vez más fuimos superiores durante gran parte del partido pero la falta de instinto asesino del equipo y la escasa punteria de nuestros puntas unidas a la endeblez defensiva hicieron que 2 puntos volaran una vez más de El Molinón.


El partido empezó raro con los 2 equipos con muchos problemas para conservar el balón en los primeros minutos, esto era debido fundamentalmente al Alavés que salió con las líneas muy adelantadas presionando muy fuerte lo que hacía que el Sporting perdiera el balón muy rápido y pese a la floja defensa de nuestro equipo cuando tenían el balón se mostraban muy imprecisos perdiendolo rápido. No obstante el Sporting poco a poco fue haciendose con el dominio del balón y el partido metiendo a los vitorianos cada vez más atrás, el fruto de ello fue una gran jugada en la que Barral tras recibir de Míchel dió un balón precioso que dejaba a Congo sólo delante de Porató, el colombiano lo dribló sin problemas y adelantó al Sporting, antes de esto Barral ya había dado 2 buenos servicios a sus compañeros que éstos habían desaprovechado, corría el minuto 20 más o menos y el Sporting dominaba a un Alavés que no se acercaba al área de Roberto y que además se había quedado sin De Lucas por lesión. Los rojiblancos siguieron llegando y tuvieron un par de jugadas más para sentenciar el partico, sobre todo una en la que Congo se plantó tras una buena jugada de equipo sólo ante Porató y el rechace del meta le llega botando a Barral a la izquierda de la porteria, con ésta desguarnecida tras la salida del meta y el gaditano echa incomprensiblemente el balón fuera. Ahí me empecé a temer lo peor, ¿ nos acordaríamos de eso en el descanso? Pues sí porque a partir de ahí el Sporting fue aflojando cada vez más hasta que al borde del descanso Joni se confió y regaló un balón en línea defensiva al Alavés, Samuel tuvo un falló garrafal al ir al corte y el ex del Sporting le dejaba el balón a Jandro para que fusilara a Roberto 1-1. Y nos la lían un antiguo jugador nuestro y un sportinguista confeso como Jandro.


Y pudo ser peor de no salvar Marcos Landeira un balón bajo palos enun error defensivo de todo el equipo rojiblanco tras una falta. Tras el descanso el equipo no podía combinar ni una jugada y sólo la falta de ambición de el Alavés y un par de intervenciones de Roberto evitaron que el Alavés se adelantara en el marcador. Hasta el final del partido sólo una discusión de Barral con un sector de la afición y un estadio que seguía animando a los suyos, el equipo sólo pudo acercarse a la porteria los ultimos minutos del encuentro con balones largos y se intuía mucho más peligro en las acciones del Alavés. Lo mejor para el Sporting fue que el árbitro pitara antes de que se esfumaran 2 nuevos puntos.

En resúmen un partido que con las múltiples ocasiones de la primera parte no debería haberse escapado nunca pues hasta el empate (que descompuso brutalmente al equipo) el rival no llegaba ni a aproximarse al área del Sporting y como conclusión que de nuevo un fallo de los centrales, que volvieron a cuajar un partido desastroso, le costó muy caro a nuestro equipo. Ya sabemos que zona del equipo hay que reforzar con prioridad, que lo hagan de una vez.