domingo, diciembre 11, 2011

Rayo Vallecano 1 - Sporting 3. Mucha diferencia

Utilizó el título de la crónica anterior para, en justicia, ponerlo en esta a nuestro favor. El Real Madrid fue muy superior al Sporting la semana pasada y esta lo fue el Sporting al Rayo Vallecano en un partido que, por otra parte, era bastante engañoso. El Rayo en su estadio es muy incómodo, con buenos jugadores del centro del campo para arriba y con peores sensaciones en la retaguardia, y esta semana con la marejadilla de las cinco denuncias por impagos seguro que querrían mandar un mensaje de que eso no les afectaba. Además ambos equipos tenían muchas bajas, con la de Lass de última hora (uno de los más desequilibrantes del cuadro madrileño) por un overbooking en su avión de regreso a España.

La primera sorpresa, quizás ayudada por el hecho de que el más rápido de los extremos del Rayo no iba a jugar por el motivo mencionado, fue que Preciado no ponía a Damían en el lateral y colocaba ahí a Botía. Aunque ahora, por la victoria, es fácil decir que acertó (además así lo creemos) trataremos de no ser resultadistas y analizar esta decisión más allá de ser declarados defensores del cántabro. Por el lado bueno está el hecho de que en Vallecas, donde se iban a colgar muchos balones, era buena cosa tener a Botía también "al resto", a lo que hay que sumar el excelente partido de Gregory la semana pasada que merecía continuidad; por el lado malo está el hecho de que, se diga lo que se diga, se señala a Damián por el error de la semana pasada algo que, teniendo en cuenta que Preciado ha de mirar por el bien general antes que por el particular, resulta secundario. También cuenta que a falta de saber quien jugará en Copa, uno de los habituales de estas últimas jornadas tendrá muchos minutos a las espaldas, aunque con el parón navideño cerca no debería ser problema. Ya que es evidente que a Preciado lo hubieran machacado por esto si perdemos, habrá que aplaudirle al haber conseguido la victoria ¿no?

Por el Sporting jugaron Juan Pablo en portería, con defensa para Botía, Gregory, Iván Hernández y Canella; por delante Rivera y André Castro, con otra línea de tres por delante de ellos formada por De las Cuevas, Nacho Novo y Trejo, con Barral de delantero centro. También entraron en la segunda parte Bilic, Carmelo y Sergio.

Primer Tiempo

Nada más empezar, en el minuto uno, el Rayo Vallecano pidió un penalty que no parecía (además de que parecía que la jugada era fuera de juego por poco que no se señaló) y justo a continuación una internada de Barral acaba con falta lateral que, tras buen saque de De las Cuevas no logra rematar bien Iván Hernández. Justo después, en el minuto seis, Barral pide un penalty que parece existir pero que exagera demasiado, para que un árbitro como Lahoz que deja contacto (luego hablaremos de él que me pareció excelente más allá de jugadas puntuales) lo señalase.

Apenas un par de minutos después Barral pelea uno de esos balones que solo busca él y saca petroleo forzando una salida horrible del portero Cobeño, que tras mal despeje de Labaka, está descolocado para evitar que Barral controle ante un defensa y cambiando de pierna defina muy bien el cero a uno.

A continuación el Sporting tuvo grogui a un Rayo que más allá de algún tiro fuera desde lejos veía como los latigazos del Sporting al ataque eran ocasiones de gol casi siempre. Primero Barral cedió un balón atrás que dejaba solo a Novo aunque el gallego ni se enteró (y no fue a buscar remate, algo que un media punta debe hacer), justo después Novo hace una jugada muy buena con globo a Labaka y cuando ya va a rematar a puerta el defensa se rehace y le roba la cartera in extremis, después Barral deja solo de nuevo a Novo para fusilar a Cobeño y lo hace pero sin problemas para el portero. Se veía que Novo estaba enchufado y se veía a Barral en una de sus mejores tardes.

Sin embargo, con estos fallos del Sporting el rayo coge moral y colocando a Trashorras en el centro comienza a ganar el centro del campo, logrando crear peligro sobre la puerta del Sporting. Primero en un balón de Piti escorado que tira a la base del palo y despeja bien a corner Juan Pablo, y después en remate solo en el área pequeña de Arribas que echa fuera por fortuna para los nuestros. Poco después de que a continuación Iván fuera el que rechaza un tiro de Michu que parecía ir a gol, Barral obliga a Cobeño a despejar a corner una internada suya con tiro muy intencionado a la cepa del poste y en el corner casi marca el Sporting pero Botía remata muy mal con Iván mejor colocado.

En las siguientes jugadas el Rayo se sigue lanzando al ataque y prueba con tiros lejanos, primero de Piti y luego de Trashorras, que se van fuera aunque no por demasiado, pero a continuación una contra que acaba conduciendo De las Cuevas acaba con un balón interior a Nacho Novo que encuentra (como siempre) el hueco al espacio y pese a no rematar bien (parece que da en un defensa, algunos opinan que intentaba pasar a la derecha a Barral que venía solo) logra marcar el segundo destrozando la moral de un Rayo que se vino abajo y qu eni siquier a aprovecho la única ocasión que le quedó en la primera parte, que fue un balón suelto que le quedó en el área a Movilla y que remató a las manos de Juan Pablo.

Segunda Parte

El Rayo tenía que ir a por el partido y el Sporting estaba en el escenario que más le gusta: agazapado y preparado para la contra. Así en el minuto 56 le pitan un fuera de juego a Barral que se iba solo y que, por poco, no era. A continuación justo Tamudo toca forzado un balón que gana a la defensa y su centro al área pequeña no lo busca nadie y se pasea sin ser rematado.

En el minuto 59 pide penalti el Rayo por derribo de Canella que parece existir pero que es exacto en todo al de Barral de la primera parte, incluso en la exageración en el contacto sufrido, y Lahoz no pita. Ambos penaltis son penaltitos y al menos usó el mismo criterio, que es lo que hay que exigirle al árbitro.

Un par de jugadas después un balón largo va para Novo pero llega con ventaja el defensa que, sin embargo, se lía dejando el balón al atacante del Sporting que define bien solo ante el portero, demostrando que tiene gol. El tanto cierra el partido y comienza el carrusel de cambios y el pase de ocasiones hasta el final sin demasiada incidencia, como una falta que tira Bilic y salva Cobeño con problemas o un par de centros peligrosos del Rayo más por inercia que por otra cosa.

Al final, Michu encuentra un balón que rechaza Juan Pablo, el balón va claro para Canella que, como hace una vez en cada partido, se duerme y deja que se la robe un contrario, en este caso el propio Michu y hace el tanto del honor del equipo local, justo antes del pitido del árbitro.

Lo mejor

TRES puntos maravillosos

NOVO. Sin duda el hombre del partido. Es un jugador que tiene algo muy importante: gol. Se nota que viene de jugar de un grande en otro país y su juego está demasiado acostumbrado a eso para bien y para mal, o sea, a jugar al espacio sin tener que trabajar en defensa (algo que aquí no se puede hacer) y emerger cuando su equipo vaya por delante en el marcador porque el equipo rival dejará huecos y el es LETAL en esa situación... le falta demostrar que en un partido que no se abra también puede resultar imprescindible. Desde luego tiene tiro, tiene velocidad y va a tener, como deciamos desde hace tiempo, mucha importancia este año en el Sporting. Ánimo NOVO.

IVÁN y el resto de la zaga, que estuvo incontestable todo el partido.

El trabajo de TREJO y el trabajo de BARRAL que siempre es total y que, con alguien cerca para aprovecharlo, es aún más notorio.

En general todo el equipo, que ha demostrado que sigue en la dinámica de antes de los partidos del Levante y Real Madrid (que por otra parte eran grandes escollos) y que empata a puntos con el primer equipo fuera del descenso y se acerca a otros muchos, con un gran resultado ante un rival que no se escapa y que, además, ya jugó y perdió su próximo partido.

Lo peor

Poca cosa. Si acaso que en TODOS los partidos Canella se duerme en algún balón fácil en el que le meten el cuerpo y acaba costando un gol o, al menos, una ocasión clara de gol. Con 0 a 3 pasa más desapercibido, pero tiene que ser menos pusilanime en esas acciones porque ensombrecen sus muchísimas virtudes que, por cierto, le siguen haciendo imprescindible.

El árbitro

Nunca metemos esta sección, o casi nunca, pero hoy lo merece. Más allá de que a un equipo sin picardía como el nuestro y además muy intenso en la presión, le viene bien un árbitro de estas características, lo cierto es que de forma objetiva da gusto encontrarse un colegiado que deja jugar y que lo deja claro, de modo que los equipos a los que arbitra pronto dejan de pensar en otras cosas que no sea en jugar. Además, aunque puede equivocarse como cualquiera, transmite una coherencia en su criterio, manteniéndolo todo el partido y para los dos equipos.

Mención especial una jugada en la que en una contra de Trejo le hacen falta continuadamente, con agarrones claros, sin que se tire. Al final pierde la pelota, se cae junto a un defensor y hace una faltita. El árbitro pita la falta de Trejo y saca amarilla al del Rayo por los agarrones continuados. Disciplinariamente tan brillante como poco habitual.

Sin duda Lahoz es, para mí, uno de los mejores árbitros que tenemos en lo reglamentario y, sin duda, el mejor para ir a ver un partido de fútbol.




Ahora, con la Copa el miércoles, toca disfrutar de la victoria del Sporting en la competición que realmente importa, así como la buena imagen dada. Ahora a rematar la faena en casa contra el Español el fin de semana próxima.

1 comentario:

Abraham dijo...

Partidazo del Sporting que demostró estar a años luz del Rayo en oficio y calidad.

Destacar el buen papel de Botía en el lateral derecho y que la mejora de prestaciones de Novo cuando se le aleja de la banda.

En lo negativo, Canella sigue estando muy lejos de su mejor versión.

El Sporting parece mucho mejor que varios equipos de Primera y ya recibió en casa a la mayoría de los cocos, no parece que vayamos a sufrir grandes apuros este año pese a tener peor plantilla que la pasada temporada, gracias a que los rivales también son más flojos.