jueves, septiembre 04, 2008

Acebal premiado

Por fín es premiada la abnegada labor de José María Meana Acebal en el Sporting, el técnico recibirá mañana en el Restaurante La Campana la Insignia de Oro del Comité Asturiano de Entrenadores en el Día del Entrenador Asturiano, este galardón viene a reconocer una vida dedicada al fútbol, siempre ligada al Sporting y a sus categorías inferiores.

Pepe Acebal nació en Gijón el 28 de Octubre de 1956 en el seno de una familia humilde de Gijón, como casi todos los niños empezó a dar patadas al balón en su barrio con los amigos. Más tarde aprendería el oficio de chapista en un taller de Gijón cuyo dueño llevó a Acebal a jugar al Cimadevilla, donde no sólo aprendió a jugar sino que también se formó como entrenador ya que no jugaba tan bien como para dar el salto a la profesionalidad. Tras ocho años de técnico en el Cimadevilla vinieron otros tantos en el Veriña, hasta que el Sporting se fijó en él para entrenar a los juveniles. Con él se lleva a Juanele del Veriña para jugar en el Sporting, primera prueba del ojo de este gran técnico.



Una vez en nuestro equipo entrena al juvenil y al cadete para acabar dando el salto al Sporting B, con el filial forma muchos jugadores para el primer equipo, consigue meterlo en Segunda B y que su juego de que hablar en Mareo. En la temporada 2000-01 llega su gran oportunidad con la destitución de Cantatore, coge las riendas del primer equipo con éste hundido en la clasificación y la moral por los suelos, la grada le acoge fatal por su nulo currículum como jugador y como técnico en la categoria profesional. Se oyen muchos comentarios de bar indignados por un chapista en el banquillo de El Molinón pero Acebal se dedica a trabajar en silencio y, poco a poco, reconstruye el equipo apoyandose en jugadores del filial y aplicando su esquema de siempre: un 4-4-2 con defensa zonal adelantada y buscando el buen trato de balón sin renunciar al sacrificio defensivo. El equipo acaba séptimo con un gran juego y Pepe se gana el derecho a dirigir el equipo la siguiente temporada.

En la temporada 2001-02 Acebal coge un equipo obligado a desprenderse de sus mejores jugadores por el imparable deterioro económico de la entidad pero logra que el equipo haga el mejor juego (en mi opinión) desde su descenso a Segunda. Además descubre a Villa, lo hace referente del primer equipo y acaba en sexto lugar en la tabla, pese a todo la imagen de Acebal se desgasta de cara a la grada (gran parte de ella no le perdona su procedencia humilde) por lo que la directiva y el técnico acuerdan que Pepe vuelva a dirigir el B para no quemarlo. Allí sigue formando y descubriendo jugadores que nutrirán el primer equipo, con la crisis económica sus funciones en el Sporting aumentan, ojeador, encargado de Mareo, entrenador del B, coordinador del fúbol base. Este verano consigue devolver al filial a Segunda B y ante el agotamiento que le supone el trabajo de las últimas temporadas opta por una excedencia de los banquillos para dirigir Mareo y ayudar a De Dios en la secretaria técnica.

Siempre mesurado, elegante en sus declaraciones y algo tímido no faltó en la celebración de los ascensos del Sporting y el B a final de temporada, sin dudar en abrazarse a la gente en el jolgorio popular. Su amor por el fútbol y por el Sporting está fuera de duda, también su talento, así que no dudamos que volverá a los banquillos antes o después, quien sabe si al del primer equipo, la puerta sigue abierta para Acebal, justo receptor de este galardón y merecedor de muchos más.

1 comentario:

Tony dijo...

Premio merecidisimo para mí. Hay que reconocer la labor de gente como él. Enhorabuena.